Decorar un cuarto de hermanos de distintos sexos puede parecer complicado (cada uno de los chicos debe tener su espacio individual donde se sienta especial, pero al mismo tiempo tiene que compartirlo con su hermano). Pero a no colapsar que les voy a dejar varios consejos para que les sea simple y el ambiente les quede bárbaro! Es que sí, es posible ambientar el cuarto con colores y decoración especiales para cada uno, creando un espacio bien diferenciado, pero a la vez unificado.
- Para las paredes, lo primero que recomiendo definir, es el color. La elección de un tono unisex es la más acertada. Hay muchísimos colores interesantes y originales que sirven tanto para varón como para mujer. El verde es una buena opción, es neutral, y los tonos claros, tirando al amarillo, dan mucha vitalidad y alegría al espacio. Si no logran decidirse, el blanco no falla, y además aporta mucha luz y amplitud. O algún gris claro o tono neutro, que va a servir de base para dar con el resto de los elementos los toques especiales.
- Otra opción es, si tienen suficiente espacio, optar por pintar y decorar el cuarto con diferentes tonos, una para él y otra para ella. Eso sí, tienen que ser armoniosos y complementarios. Si bien es verdad que los colores típicos son rosa para la mujer y azul para el varón, y son colores que combinan, hay otras duplas más originales que también funcionan: verde y malva, azul y blanco, azul oscuro y azul claro.
- Los papeles pintados con rayas para las paredes, tanto verticales como horizontales son una gran alternativa. Aportan un efecto visual muy lindo y se pueden mezclar perfectamente con textiles de diseños femeninos, masculinos, y neutros.
- A la hora de decorar las opciones son dos. O delimitar sectores con decoraciones armónicas, o elegir una misma temática para todo el ambiente. Si quieren delimitar el sector de cada integrante, de darle ese toque personalizado, la ropa de cama, al igual que los objetos decorativos, juegan un papel muy importante en un dormitorio mixto. Se puede conseguir un espacio uniforme para los dos sexos poniendo las mismas estructuras de camas y mesas de luz, aportando los toques distintivos con los edredones, sábanas, almohadones, mantitas, alfombras y pies de cama, que además aportarán diferentes texturas.
Si por el contrario, eligen una misma temática concreta para todo el ambiente, recomiendo los diseños geométricos, tropicales, o vinculados a los animales, que estampados sobre papeles y textiles generan un ambiente unisex, fresco y colorido.
- Para personalizar cada parte del cuarto, hay que sumar objetos que los identifiquen en sus cabeceras, algo que además, le va a da una mayor profundidad al cuarto: una casita de muñecas, un cuadro, una lámina que les guste, una guirnaldas de luces o colores, o letras de madera con sus iniciales o incluso con el nombre completo.
- La zona de juego debe ser común, por una cuestión de espacio, y porque los ayuda a aprender valores como compañerismo, compartir, respetar, ordenar.
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